domingo, marzo 26, 2006

Manzana de Mañana



Me gustan los comienzos,
más que los finales...
Los proyectos, las ideas, los sueños,

los encuentros y desencuentros,
los hallazgos y las pérdidas,
todo empieza y termina en mañana,
que quisiese que fuese hoy pero mañana sería ayer y no sería ni sentiría lo mismo...

Mañana te siento. Las cosquillas de la ansiedad me tienen inquieta, las mariposas comienzan a revolotear en mi abdomen queriendo salir a tocarte, a besarte, a inundarte de mí, a embotar tus sentidos con mi esencia.

Mañana te veo. Y al mirarte, cómo evitar no rozarte y recorrerte con las invisibles manos del deseo, cómo detener las caricias que mi cuerpo irradia al tuyo, cómo no comerte a besos étereos que te dan ese picor en los labios que inevitablemente muerdes con vehemencia como cazando al vuelo esos besos silenciados.

Mañana te huelo. Me dejo llevar por las sensaciones cuando te huelo núblandose mis otros sentidos, poniéndome sorda a tus palabras, queriendo quedarme por ese siempre del instante apoltronada entre tus brazos, respirándote para llevarte dentro, para llevarte conmigo, para quedarme contigo.

Mañana te tiento. Juego al sútil encanto de la conquista, juego a las miradas esquivadas y a las encontradas, juego a las sonrisas cómplices, juego a seducirte en silencio, juego a dejarme llevar por tus antojos, juego a seguirte en tu juego.

Mañana juego y apuesto a que sí sé, que vos sabés, que yo sé y a que yo no sé, que vos sabés, que no sabés... Que hacer conmigo.

Canción del post: "Para que me quieras como quiero" de Ricardo Arjona. Para escucharla o descargarla clickea AQUÍ

domingo, marzo 19, 2006

Colgando ropa a las 11.30 PM



"Mirando la luna" by Didí Lourenço

Cuelgo la ropa a secar en la noche...
No es una manía de mujer sin tiempos ni espacios diurnos, tampoco radica esta costumbre en alguna creencia mágica en los influjos de la luna o el calendario maya, ni mucho menos en la pereza que me da lavar pilas y pilas de ropa a mano...

Es una excusa, una excelente excusa la de que aprovecho el primer sol de la mañana así tengo dos tandas de ropa seca al día.
Pero la verdad es que cuelgo la ropa de noche para ver la luna.
Cuelgo la ropa como quién cuelga los deseos, anhelos y esperanzas para que viajen con poco tráfico a su destino, aprovechando las muchas almas que sueñan en ese mismo momento sus respectivos sueños...
Cuelgo la ropa y le sonrio a la luna, cómplice muda de mis andanzas nocturnas, por que aunque sólo este en mi patio, viajo, viajo mirándola a tu lado. Miro el cielo macro estrellado y siento tu mirada esquiva, cómplice, extraña, confiada...

Cuelgo la ropa como quién cuelga caricias, pidiéndole a la brisa veraniega te las lleve, para que las sientas antes que te duermas acompáñandote en dónde quiera que estés, atrevidas, juguetonas y reprimidas...
Cuelgo la ropa y le coqueteo a la luna, le hago miraditas, esperando que ella te las dé cuando levantes tu mirada y veas con extrañeza que la luna te coquetea y te hace ojitos sólo para tí gracias a mis ruegos nocturnos...

Cuelgo la ropa mirando la luna por que ella te me recuerda, y me emociono de lo rico que se siente quererte así, sin la necesidad de no más que una noche despejada, estrellas titilando en la inmensidad azul y una luna que fugitiva como yo, te sueña.


Canción del post: "A la orilla de la chimenea" de Joaquín Sabina.
Para escucharla o descargarla clickea AQUÍ

jueves, marzo 16, 2006

De aromas y narices


Los cinco sentidos a través del amor Parte II



Nariz piquetera (Huelguista de primera línea)

Siento un cosquilleo... Cada vez más intenso, cada vez más urgido, cada vez más imperioso, más obsesivo...
Me froto fuerte, y la sensación insiste en estar allí, me sigo frotando, si sigo así me la voy a arrancar pero el cosquilleo no cesa y el cosquilleo me puede...
Cuando con sorpresa, escucho a mi nariz indignada gritarme: INGRATA!!!
Cuántos momentos de amor te he hecho vivir? Cuántos olores he guardado para revivir recuerdos? Cuántos momentos de felicidad aún hoy rememoras gracias a los olores que conservo en mi memoria pa que no se te vayan nunca? Y con quién empezás para los sentidos a través del amor? Con el gusto, ese que sin mí no es nada o acaso no sabés que siempre andamos juntos, que es un torpe, despistado y confundido y que si no estoy yo no puede distinguir el limón de una limonada...
Exigo el inmediato reconocimiento de mis aportes en el amor o de lo contrario me declaró en huelga de nariz y no vas a oler nada...
Vaya personalidad tiene mi nariz!!! Quién se cree que és?

A mi no me va a venir a amenazar...

Hace dos días huelo que huelo y nada huele...
Por eso me senté a escribir a ver si firmo la paz con mi nariz y por fin el mundo se volverá aromas para mí...


Los olores del amor...

Siempre que saludo a alguién, lo huelo.
No puedo evitarlo, mientras doy el beso en la mejilla, respiro a la persona que saludo para guardarla lo más entera que pueda.
La más de las veces, me queda el aroma impregnado en la nariz y cuando es el olor amado, me puede durar hasta una semana conmigo.
Todos tenemos una colección de olores en recuerdos...
Todos tenemos una inmensa cantidad de olores que nos hablan de amor... Aromas que penetran en uno y que se quieren llevar por siempre aunque su destino sea el más efímero de todos...

La colonia de pino, el aroma de mi papá y de mi abuelo, el olor de los abrazos, el olor de las tardes de charla, de las historias contadas mil veces pero siempre nuevas, el olor de las aventuras en el parque de la casa de mi abuelo...

El aroma a especies, mi mamá y mi otra mamá, la cocina más exquisita, olores penetrantes, inteligentes, que sabe lo que quieren, que otorgan, que alimentan el alma... El olor del amor que da todo, el aroma de las manos abiertas, el aroma del amor sin tiempo ni espacio.

El aroma de rosas, mi hermana, dulce, silenciosa, compañera, enamorada, una eterna enamorada, el olor del amor romántico, un poco de telenovela de la tarde, el olor de la timidez, el olor de del amor que espera.

El aroma de los cítricos, la Tití, Meche, Laurita, toda personalidad, jovial, la juventud y la experiencia, la amistad sincera, los mates que van y vienen, las charlas eternas, la complicidad de las miradas, las risas, los llantos... El aroma de la amistad sincera, de la amistad sin dobleces, de las mujeres y hermanas de mi vida, el aroma del amor fraternal femenino.

El aroma a flores silvestres y jazmines, el olor de la alegría, el aroma de lo espontáneo, decidida, despreocupada, curiosa, desmedida e invasiva... El aroma del amor de primavera, el aroma de las ninfas en el bosque, el aroma del amor que juguetea, el olor del amor en libertad, el amor sin fronteras, el aroma del amor sin pasado, sin futuro, del amor del hoy... Mi aroma personal.

El aroma del tabaco, mejores amigos, hermanos adoptados varios y lejanos (viven casi todos en otros países), el aroma de una noche de charla, de una salida de juerga, de horas y horas de filosofar sin hacerlo, el olor de la chaqueta a la que me aferré alguna vez, en el que lloré alguna que otra vez... El aroma del amor incondicional, el que no le importa quién, qué o cómo sos, el aroma de la amistad masculina, de la amistad fraternal.

El aroma a foresta... El aroma de un bosque luego de una lluvia (y sí también sale el arco iris), el aroma a lo descubrir, el aroma de lo no explorado, el aroma del misterio natural, el aroma de la búsqueda, de la aventura, de la experiencia... El aroma del amor que se busca, del que se encuentra, el amor que se explora, el amor que se investiga una y otra vez, el olor del amor que invade y no cede a olvidarse...

Ni que pensarlo tengo, que me gustaría olerte a foresta...
Y hacer juntos un bouquet de amor.

viernes, marzo 10, 2006

Quiero que tus labios me sepan a Pera



El amor a través de los cinco sentidos Parte I

Perdida en mi mundo interno, los recuerdos, amigos y enemigos del tiempo, me traían sabores del pasado, sabores dulces, ácidos, amargos, salados y empalagados de amor.
Por que si el amor es la estructura inherente a todo, los labios son la materialización del gusto como uno de los sentidos del amor. El gusto, la boca, los labios, el paladar, la lengua, los dientes, los besos, las mordidas, los huecos, los cuerpos saben y saben rico. Cada quién el suyo, cada quién con su único y particular sabor.
Y los besos, los besos son el vehículo perfecto del deseo, es ese camión que te atropella y te deja atontado anotando la matrícula (lease teléfono o e mail) con una sonrisa, es el principio y el fin de los encuentros cercanos, es el comienzo de algo o el punto final de todo.
Miles de besos se abren paso en mi cabeza y sus sabores empiezan a invadirme...



Beso por Elva G Garibay
(Anabiosis... Grax amix por dejarme traer tu pintura!!!)

*Besos con sabor a fresa, pequeños, tímidos, recatados, tiernos, delicados, adorables... Apenas un roce, apenas un contacto, efímero pero dulce... Besos dulces como los de mi hijo.

*Besos con sabor a ananá, divertidos, picantes, tal vez un poco secos pero prolongados, dominantes... Besos que te dejan sabiendo a ellos por un rato, besos que te invaden el cuerpo...

*Besos con sabor a mandarina, alegres, traviesos, juguetones, apurados y fogosos, algo dulces y algo ácidos... Besos que te dejan con el borde de los labios rosados pero feliz, besos que rien y te hacen reir... Besos como los míos, para que negarlos si me gustan darlos.

*Besos con sabor a mora, jugosos, salvajes, lujuriosos, escondidos y apurados... Besos que te ahogan, besos dados en la oscuridad, besos que muerden y que te dejan hinchados los labios, besos prepotentes y urgidos... Besos que te dejan manchados...

*Besos con sabor a limón, ácidos, resignados, no deseados, despreciados, de mal sabor... Los besos de la molestia, los besos que no quieren darse, los besos que no quieren ser recibidos... Esos besos mejor dejarlos al olvido o en el fondo del saco de besos.


*Besos con sabor a duraznos, dulces, constantes, lo suficientemente mojados, confiados, estructurados... Besos que te llenan la boca, besos que no piden ni más ni menos, besos de labios que se conocen desde hace tiempo...

*Besos con sabor a sandía, exóticos, fugaces, húmedos bien húmedos, calientes pero de los que te dan más hambre... Besos que huyen, besos que buscan, besos que saben a dónde van...

*Besos con sabor a manzana, conocidos, algo latentes, pastosos, suaves, largos... Besos que están maduros, besos de los que duran en la boca, besos que van al mismo ritmo, besos compañeros.

*Besos con sabor a ciruela, amargos, ácidos, exigentes, arrogantes, egoístas, insultantes...Besos de mal talante, besos dados de mala gana, besos obligados, besos de desencuentros... Estos besos es mejor perderlos que encontrarlos.

*Besos con sabor a plátano, joviales, irreverentes, irresponsables, algo infantiles, dulces e inesperados... Besos robados al pasar, besos de adolescente enamorada, besos de prisa y sonrojarse.

*Besos con sabor a pera, sinceros, liberales, prolongados, sabrosos, placenteros, perdurables, indulgentes, afables, atentos, dulces, alegres, confiados, húmedos, adictivos... Besos que se toman el tiempo, besos que se disfrutan el momento, besos que se piden y se buscan, besos que viven el hoy, besos que no tienen edad, besos que no esperan nada, besos que encienden la calma, besos dados con ganas acumuladas, besos compartidos en secreto...

Definitivamente, quiero que tus besos me sepan a pera.


Creado mientras degustaba medio kilo de peras y pensaba en su boca.

martes, marzo 07, 2006

Casa Devastada


Ruinas a mi alrededor, ruinas donde miro, donde estoy, donde soy...
Ruinas en mi cabeza, rompecabezas al que le faltan piezas, piezas de sentimientos fugados, pedazos de recuerdos enlatados en un ayer tan ayer.
Escombros del hoy que opacan la vista, escombros de la Torre de Babel de mi vida, escombros con tu nombre que en mil idiomas me hablaban de amor, escombros que hoy quiero barrer con la escoba del olvido pero que no se dejan para no perder la costumbre de acostumbrarnos a que estén ahí.
Fragmentos de miradas, fragmentos de mis ganas, fragmentos de un futuro común construído en la nada, fragmentos que nunca fueron, fragmentos que hieren y desgarran el hoy, develando su verdadera cara, la cara de la apatía, la cara de la desidia, la cara del ya no más, la cara del ya no hay más que hacer, la cara de la derrota.
Despojos de mí, despojos de tí, despojos de lo que fuimos y no somos, despojos de lo que deberíamos ser, despojos de lo que queremos ser.
Ruinas, piezas, escombros, fragmentos, caras, despojos...
Desolación...
Y la casa desvastada por los restos del después.